Bufones disfrazados de poetas,
burócratas arrogantes,
pedantes pregoneros,
sois vosotros los abanderados:
portadores de enseñas mustias.
Ser poeta no es ninguna virtud.
Es sólo un vicio innato.
Un peso que se lleva
con angustia.
(Eugenio Montale. Diario póstumo, en Poesía completa.
Edición bilingüe de Fabio Morábito. Barcelona,
Galaxia Gutenberg/ Círculo de Lectores, 2006).
Impecable.
ResponderEliminarUn vicio innato, un peso que se lleva con angustia. Claro que no soy Montale, ni cerca, pero se siente eso, tal cual.
Un beso.
Besos
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