(En un colegio rural del pueblo tangerino Had Al Gharbia, poco antes de mi cuarto o quinto desayuno de la mañana y rodeado de niños, diamantes de verdad, le preparo a este caballero menudo un batbout o mkhamer --un tipo de pan riquísimo-- con zebda (mantequilla que mi pequeño príncipe y perfecto anfitrión, haciendo gala de un innato refinamiento y una sana sabiduria infantil, prefiere amarilla, más sabrosa que la blanca o clarificada) y mucha mucha miel. Acompañaremos todo ello con una gran vaso de leche.) (Fotografía de Elena Álvaro Safont).
...y nosotros aquí con unas tristísimas galletas integrales : )
ResponderEliminarbesos y abrazos
No preocupare, yo te preparo un desayuno la próxima vez que nos veamos (aunque sean las siete de la tarde). Disfruta. Besos & abrazos
ResponderEliminar