martes, 6 de mayo de 2014

Desalme


Si nos llamara la naturaleza, de la que recibimos el primer préstamo, le diremos: toma mi alma mejor que tú me la diste; no vuelvo la espalda ni escondo; dispuesto tienes por mí, que lo quiero así, lo que me diste sin yo enterarme: llévatelo.

(Lucio Anneo Séneca. De tranquillitate animi, XI, 3.
Imagen: detalle de La muerte de Séneca de Rubens)