Entre tantos oficios ejerzo éste que no es mío, / como un amo implacable / me obliga a trabajar de día, de noche, / con dolor, con amor, / bajo la lluvia, en la catástrofe, / cuando se abren los brazos de la ternura o del alma, / cuando la enfermedad hunde sus manos. // A este oficio me obligan los dolores ajenos, / las lágrimas, los pañuelos saludadores, / las promesas en medio del otoño o del fuego, / los besos del encuentro, los besos del adiós, / todo me obliga a trabajar con las palabras, con la sangre. // Nunca fui el dueño de mis cenizas, mis versos, / rostros oscuros los escriben como tirar contra la muerte.
("Arte poética", en Velorio del solo.
Buenos Aires, 1961).
Cohabito con un oscuro animal. / Lo que hago de día, de noche me lo come. / Lo que hago de noche, de día me lo come. / Lo único que no me come es la memoria. Se encarniza en / palpar hasta el más chico de mis errores y mis miedos. / No lo dejo dormir. / Soy su oscuro animal.
("El animal", en Los salarios del impio
y otros poemas. Madrid, Visor, 1998).
me echaron de palacio/ no me importó/ me desterraron de mi tierra/ caminé por la tierra/ me deportaron de mi lengua/ ella me acompañó / me apartaste de vos/y se me apagan los huesos/ me abrazan llamas vivas/ estoy expulsado de mí
yehuda al-harizi
(1170-1237/ toledo-provenza-palestina)
("El expulsado", en Dibaxu.
Barcelona, Seix Barral, 1994)
"el pájaro se desampara en su vuelo
ResponderEliminarquiere olvidar las alas
subir de nada al vacío donde
será mentira y se acuesta.
Como luz en el sol
es lo que no es todavía
igual al sueño del que viene y no sale
traza la curva del amor con muerte
va de la conciencia al mundo
se encadena a los trabajos de su voz
retira el dolor del dolor
dibuja su claro delirio con los ojos abiertos,
canta INCOMPLETAMENTE".(Juan Gelman)
Como si cielo o amor, como si canto o exilio, la poesía de Juan Gelmán está poblada de pájaros:
ResponderEliminar"no están muertos los pájaros
de nuestros besos /
están muertos los besos /
los pájaros vuelan en el verde olvidar /
pondré mi espanto lejos /
debajo del pasado /
que arde
callado como el sol /"
("XXIX", en "Dibaxu", op. cit.)
"Diciendo pájaro lo destruí
y eso no tiene perdón.
El pájaro sigue volando.
Lo he destruido en mí, no más.
Ya no vuela, ya no
construye su nido en el árbol que no soy ni
agita su pensamiento en mí.
Se perdió entre la enramada y el humo del atrio.
¿Quién soy para el?
Ya nada.
Antes me visitaban lo que perdí
y el recuerdo de lo que perdí.
Ahora son silencio descifrado
y ciertas esperanzas han muerto".
("El pájaro", en "Valer
la pena". Madrid, Visor, 2002).
"Mi amor son dos cosas diversas:
el día que es y el día que fue.
Entra un pájaro por la ventana
y todo se suspende, el amar,
el ser amado, todo vuela
de hoy a después, a tu pelo
que azula la noche como
tu mano cuando
borra el espanto de la dicha".
(Idem).
"querido amor que partís como un pájaro
acostado sobre los horizontes
¿estará bien darnos todos al todo/sin
ser parte de nada/ni siquiera del vuelo que
te lleva?/¿piensan hermanas y hermanos
que rodeando se puede llegar/o
partiendo y quedándose a la vez se llega
a la unidad buscada como manjar celeste?
o sea/dura es la vida o esta
salud que cavo para encontrarte como luz!
o palabra/ramita donde te poses como
la mano tuya sobre mi corazón"
("Comentario I (santa teresa)", en "Citas y comentarios". Madrid, Visor, 1982).
"Un pájaro vivía en mí.
Una flor viajaba en mi sangre.
Mi corazón era un violín.
Quise o no quise. Pero a veces
me quisieron. También a mí
me alegraban: la primavera,
las manos juntas, lo feliz.
¡Digo que el hombre debe serlo!
Aquí yace un pájaro.
Una flor.
Un violín."
("Epitafio", en "Violín y otras cuestiones". Buenos Aires y 1956).
Velorio del solo
ResponderEliminar"En la fecha
Solo de ti,lleno de ti,
esta tarde a las siete
el ciudadano de tu ausencia
se palpaba la cara,la voz, los papelitos,
deberas comprobando
que tus ruidos andaban por sus huesos
y en general te habías ido.
Golpeó puertas, teléfonos,
la gran ciudad estaba equivocada sin tu pelo
y sentía tirones detrás del corazón.
A lo mejor era el tabaco,
de todos modos, yo soy otro:
un pedazo de ti,
alguien a quien castigan puertas,ruidos, teléfonos,
y anda a saber por qué
toda la parentela de la muerte."
(Juan Gelman)